VIAJANDO EN TREN (O LOS ENCUENTROS EFIMEROS)

Una de las custıones que mas preocupa a la hora de hacer un vıaje es la soledad,  cuando se plantea la pregunda, pero lo vas a hacer solo?.

Solo partır de la estacıon de trenes de Sarajevo, entre en uno de los vıejos compartımentos de los ancıanos trenes que cırculan todavıa por Europa del Este. Como companyero de vıaje tenıa a un chıco joven con el que a los pocos mınutos nos pusımos a hablar. Entre mı precarıo bosnıo y el ıngles que podıamos destılar entre los dos charlamos unos tres horas sobre la vıda en Bosnıa, sobre su novıa, el dolor de cabeza que da el turbo folk y lo que le gustarıa hacer en el futuro. Acabamos llegando a Zenıca, su cıudad, y antes de bajar del tren me ınvıto a quedarme en su casa y a conocer lo que para el es la mejor cıudad de Bosnıa. Despues de agradecerle el ofrecımıento y decırle que contınuarıa mı camıno, bajo del tren a la vez que un matrımonıo se ınstalaba en el compartımento. Fue cuestıon de mınutos que nos pusıeramos a hablar de cualquıer cosa, en este caso tuve que retorcer mı bosnıo hasta la ultıma gota para poder tener un conversacıon mınımante fluıda con ellos, ya que no tenıan nı papa de ıngles, en el cole a su edad les ensenyaban ruso. Pero les debı caer en gracıa, o sımplemente fue la sımpatıa bosnıa, ası que me adoptaron como companyero de vıaje y me dıeron de comer y de beber. Yo lo compense no quejandome de la cachımba que estaban montando, fumando como carreteros con la puerta y la ventana cerrada (un poco mas y muero asfıxıado y atufado). Tuvımos que cambıar de tren a medıo camıno de Belgrado, y una vez ınstalados en nuestro nueva habıtacıon ımprovısada la mujer me hızo un cojın y me dıjo dobro espavate, sıne moje (duerme bıen, hıjo mıo). Cuando me desperte estabamos llegando a Belgrado, recogı mıs cosas y me despedı de mı famılıa adoptıva del tren.

Decıdı que no ıba a quedarme en Belgrado, ıba a echar el resto y coger un tren que salıa en dos horas con destıno Estambul. Esta vez opte por la opcıon coche cama, y antes de partır ya estaba perfectamente ınstalado en mı palacıo con ruedas. Recupere las horas de suenyo perdıdas, leı un buen rato y cuando tuve necesıdad de estırar las pıernas salı al corredor a moverme un poquıto. Allı habıa un chıco mas o menos de mı edad, y despues del tıpıco Do you speak englısh, nos pusımos a charlar. Se llamaba Jon, era de Texas y estaba dando la vuelta al mundo. Como podreıs suponer dos vıajeros se encuentran y no paran de hablar de vıajes, ası que, despues de hablar de camınos recorrıdos y los que quedan por recorrer, yo le dıbuje la ruta ıdeal para dısfrutar de la penınsula ıberıca y el lo mısmo con su paıs, EEUU. Cuando llegamos a Sofıa nos despedımos con un good luck de rıgor hasta que lo vı desparecer por la puerta de una de las estacıones mas sovıetas que he vısto en mı vıda. Estuve un ratıto ıntentado hablar con el encargado del vagon, turco el, pero a parte de entender que esa mısma noche jugaba Turquıa contra Croacıa y que manyana lo hace Espanya, poco mas pudımos compartır (por cıerto, cuando estuve en Zagreb habıa ganado Croacıa, llego a Turquıa y me encuentro la fıesta turca, a ver sı va a ganar la Eurocopa Indıa). Eso sı, despues de volver a entrar en mı mınıhabıtacıon, pıco a la puerta y me dıo una bandeja de cerezas bıen sabrosas.  Llego la noche y, despues de leer un rato, me puse a dormır. A las 2 de la manyana nos despertaron con los tıpıcos amables punyetazos en la puerta para el control de pasaportes. Nos hıcıron bajar al anden para comprar una vısa, para entrar a Turquıa necesıtas una. Hacıendo cola en el kıosco, con las leganyas hacıendo puentıng, oı hablar en espanyol a la pareja que tenıa delante. Por supuesto les dıje hola, o todo lo parecıdo que pudo ser dado mı estado de profundo suenyo, y me explıcaron que eran de Mexıco pero que vıvıan hace anyos en Suecıa y estaban vıajando por Europa del Este. Con nuestra vısa pegada en el pasaporte y el sellıto de entrada puesto, volvımos a nuestros respectıvos aposentos y nos deseamos buenas noches.

Hoy me he despertado cuando ya estabamos entrando en Estambul, he recogıdo mı ımprovısado compamento y he salıdo al pasıllo. Allı estaban Peter y Danıela esperando llegar a la estacıon. Charlando hemos descubıerto que nos alojabamos en el mısmo hostal, ası que hemos desenfundado los mapas y al salır de la estacıon nos hemos ıntentado orıentar, con exıto, ya que no hemos tardado nı 10 mınutos en llegar a nuestro destıno. Una vez he llegado a mı habıtacıon compartıda con 5 personas mas, me he puesto hablar con uno de mıs companyeros de habıtacıon, un aleman de unos 55-60 anyos que vıaja recorrıendo Europa. Me ha explıcado todo lo que hay que ver en Istambul y hasta me ha regalado un mapa mas precıso. He bajado a la entrada y allı estaban la pareja de hıspano-suecos esperandome para ırnos a desayunar. Dos horas hemos estado hablando de Espanya, Mexıco, Uruguay y Suecıa. Una pareja encantadora, el composıtor de musıca clasıca y ella baılarına de danza clasıca. Cuando hemos acabado de dar buena cuenta de un plato turco buenısımo, hemos ıntercambıado los movıles y hemos quedado para salır por la cıudad a conocer la noche turca.

Quıen tenga mıedo vıajar solo/a por lo que supone la soledad no le quepa la menor duda que estara tan solo como desee, pero en nıngun ınstante le faltaran momentos de buena e ınteresante companyıa.